¿ES EL HOMBRE UN ENIGMA?

Las enciclopedias definen al hombre como un "animal racional, moral y social, mamífero, bípedo, experto en articular el lenguaje, que ocupa la cima de la escala zoológica, un animal que es al mismo tiempo: cuerpo, alma, espíritu; razón y emoción; física y metafísica; singular y colectivo; objetividad y subjetividad; conciencia e inconsciencia..."

El hombre es una criatura singular, un fenómeno maravilloso, un gran enigma para descifrar mejor. Con su apariencia en la tierra, la naturaleza presenta el mayor hito de su evolución. Una "discontinuidad en la continuidad" de la Vida, y la única criatura con la habilidad de creatividad al más alto nivel de su potencial; él solo tiene facultades y dones que lo hacen único entre otras criaturas. A diferencia de los no humanos, el hombre no es un elemento más del paisaje en el que vive, sino un factor consciente que transforma e inventa. En consecuencia, el Universo conocido estaría incompleto sin el hombre; faltaría el factor auto determinante para completar los hechos determinados externamente, porque en el hombre, la pirámide cósmica converge hacia la cumbre más alta.

El filósofo griego Protágoras afirmó que el hombre es la medida de todas las cosas, lo que significa que el ser humano individual, en lugar de un dios o una ley moral inmutable, es una fuente que genera valores, mientras que Sócrates dijo que el hombre es el objeto más directo de la preocupación filosófica.

Durante el estoicismo (donde la virtud es el único bien), y en el neoplatonismo (de la creencia en la calidad superior de la realidad inmaterial), hubo una preocupación por la "disolución del hombre en la naturaleza", revelando la gran preocupación de estas dos concepciones de pensamiento, con ese ser admirable.

Según el concepto cristiano, "el hombre trasciende el mundo", y Jesús, superando todos los límites del conocimiento, se convierte en el biotopo del hombre integral porque había desarrollado dinámicamente en sí mismo las potencialidades heredadas de los Poderes Creadores.

En la corriente filosófica del racionalismo de Descartes, ay una ruptura radical con el viejo mundo y se crea un nuevo método para alcanzar el conocimiento, donde aparece enfatizando el papel de la razón, que "considera la razón como la principal fuente y prueba del conocimiento" o "cualquier punto de vista que apele a la razón como fuente de conocimiento o justificación". Para los racionalistas, a través de la razón, se pueden conocer proposiciones fundamentales que permiten descubrir la verdad por deducción.

En el espiritualismo idealista, "el espíritu tiene primacía en todo lo que se relaciona con el mundo y la vida humana", mientras que, para el materialismo, "el espíritu no es más que una forma de actividad de la materia que, en una fase dada de su evolución, de formas simples a formas más complejas, adquirió conciencia ..."

Jackson Mivart, el célebre naturalista inglés, analizando psicológicamente al hombre, afirmó que "el hombre es diferente de otros animales debido a las características de abstracción, percepción intelectual, autoconciencia, reflexión, memoria racional, juicio, síntesis y conclusión intelectual, razonamiento, intuición intelectual, emociones y sentimientos superiores, lenguaje racional, fuerza de voluntad verdadera." 1

Sócrates y Platón entendieron que el hombre era el resultado del ser o espíritu inmortal y no-ser, es decir, la unión de la materia con el espíritu, lo que, en conjunto, proporcionó al hombre el proceso de evolución.

Los filósofos atomistas redujeron al hombre a simples partículas atómicas que, cuando se desarticulan, se aniquilan a través del fenómeno biológico de la muerte.

La filosofía, de acuerdo con sus diversas escuelas, ha buscado ofrecer caminos al hombre que lo lleven a continuar en sus intentos de interpretar la vida y comprender al hombre.

La psicología, que inicialmente se conectó con la base filosófica, lentamente se liberó buscando estudiar la psique, alcanzando importancia para la comprensión del hombre, sus problemas y sus desafíos psicológicos.

La diversidad de tendencias en la explicación del fenómeno del hombre demuestra el interés de los académicos en la búsqueda de la liberación del individuo en relación con los desafíos y dificultades que lo afligen.

La cuarta fuerza en psicología, que surgió en los Estados Unidos, es la psicología transpersonal, espiritual, que expande el campo de investigación más allá del comportamiento, el psicoanálisis y la psicología humanista, proporcionando más aclaraciones sobre el hombre integral, permitiendo la introducción de algunas enseñanzas y experiencias de místicos orientales, brindando una oportunidad para una visión espiritualista del ser humano en mayor profundidad.

El espiritismo, a su vez, sintetizando varias corrientes de pensamiento psicológico y estudiando al hombre en su condición de Espíritu eterno, presenta la propuesta de un comportamiento filosófico idealista, en el Inmortalismo (una doctrina o creencia en la inmortalidad del alma), que tiene como principio básico la inmortalidad del individuo, ayudándole a resolver sus problemas, sin violencia y basada en la reencarnación, señalando las mejores direcciones que el hombre puede seguir.

Según Huberto Rohden, filósofo y educador brasileño, precursor del espiritualismo universalista y defensor de la Filosofía Universal que enfatiza el autoconocimiento y la autorrealización, el hombre es una entidad original y sin precedentes que nunca deja de ser hombre. Su viaje evolutivo, desde el autoconocimiento hasta la autorrealización, es su fin supremo y único, suponiendo que este hombre quiera lograr ese objetivo. El hombre puede acercarse más y más a su objetivo en la evolución, y para eso, se le dio la oportunidad de desarrollar a partir de sus potencialidades, una mayor potencialidad porque, a pesar de estar completo, el hombre sigue siendo un proceso continuo, una sinfonía inacabada con la oportunidad de convertirse en una mejor versión de sí mismo; libre para sembrar según su libre albedrío, sin embargo, obligado a cosechar lo que él sembró. La elección es responsabilidad de todos y cada uno.

Sucede que incluso si el hombre alcanza la excelencia de la sabiduría, y esto no solo en el nivel de conocimiento, sino en la razón espiritual, de la experiencia mística del primer mandamiento, con la práctica ética del segundo, nunca podrá identificarse con su Creador, el Infinito, porque entre cualquier finito (el Hombre) y el Infinito (el Creador), se interpone una distancia infinita. Puede el hombre convertirse en un mejor individuo al superar sus dramas y dilemas, en su moral y ética; puede el hombre integrarse en el Creador, pero no puede disolverse en él.

Esta es la ley cósmica que gobierna la armonía del Universo.

Cada rompecabezas se puede resolver del análisis, la intuición, la iniciativa, la determinación en su solución. En todos los sectores del conocimiento humano, se han resuelto innumerables acertijos. Depende del hombre conocerse a sí mismo, como en la naturaleza, que se revela en todo su esplendor. Mientras siga siendo una caricatura, una persona con diferentes máscaras, entreteniendo al circo de las mediocridades, permanezca estancado o caminando muy lentamente en el proceso de su evolución, corre el riesgo de desintegrarse en el éter. Esto se debe a que la intelectualización del instinto convirtió al hombre en un monstruo de avaricia y agresión, cuyas garras y dientes se perfeccionaron en forma de armas de destrucción masiva, un desagradable libertinaje sexual y un infierno de enfermedades físicas y mentales, que ningún otro animal no humano sabe o tiene experiencia.

Autoconocimiento ... Es la clave para desentrañar este enigma, y la gran apoteosis final de este descubrimiento es la autorrealización, la mayor gloria que un hombre puede lograr.

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1)- Después de más de 120 años de esta declaración hecha por Mivart y en medio de la red de comunicación informática más grande del mundo con sus diferentes programas e información, y sus miles de millones de usuarios, esta o aquella certeza ya no se puede afirmar categóricamente. La prudencia, sobre todo, debe ser usada, porque lo que el ser humano sabe, es solo una gota de agua en el océano de su ignorancia.

Estudios científicos recientes muestran que muchos seres no humanos tienen la habilidad de mostrar una conciencia individual particular y una razón que está condicionada a su etapa de evolución existencial, porque el alma del Universo está presente en todos los seres de la creación, por lo tanto, estos seres también exhiben estados mentales, sentimientos, emociones, acciones intencionales, inteligencia, personalidad, espíritu, libre albedrío, amor, intuición, compasión, culpa, pérdida y posesión, y dominio territorial.

Según los expertos en ciencia cuántica, algunos son capaces de comunicarse con nosotros a través de mensajes visuales de diferentes personajes, incluso quejándose de sus derechos. Son nuestros iguales, comparten nuestro mismo Universo, pero repartidos en diferentes aspectos.

Por citar un ejemplo, las funciones cerebrales de un perro labrador sometido a resonancia magnética, presentaron las mismas y exactas funciones que tiene parte del cerebro humano. Como los mamíferos, en general, evolucionan de la misma manera que los humanos, solo presentando diferentes características físicas, se asume que, desde el punto de vista del comportamiento, tienen los mismos atributos.

Quienes aman y cultivan la convivencia con los animales, en particular con los perros -con los que el ser humano lleva casi 15 mil años de relación- si se mira en detalle, resulta que las diversas especies son portadoras de cualidades casi humanas, en cuanto a prudencia, paciencia, disciplina, obediencia, sensibilidad, inteligencia, improvisación, espíritu de servicio, vigilancia y sed de afecto, inculcando la idea de que cuanto más se acercan a las criaturas humanas, más se asemejan; perfeccionando gradualmente sus instintos en la búsqueda de la inteligencia de la misma manera que los humanos aspiran a alcanzar algún día una etapa mayor de evolución.

Y muchos otros no humanos, entre todas las formas de vida, han mostrado sorprendentes particularidades de inteligencia universal viviendo en sus existencias.

Para los lectores interesados en otra relación sorprendente entre un humano y un no humano, visite el documental de Netflix, Mi Maestro El Pulpo, ganador en 2020 del Premio de la Academia al Mejor Documental.